Coro y Banda presentan: Música por el Mundo

3a Experiencia La Salle A y C
Isabella Giselle, Valentina Ríos y Juan Pablo Martin
Grupo Representativo de Escritura Creativa
Fotografías: Ninandii Antonio, Comunicación Institucional
Es miércoles, y el calor seco del Gimnasio Auditorio delata que nos encontramos en Oaxaca. Son las 3 de la tarde y la Universidad La Salle Oaxaca está lista para compartir con su alumnado una nueva edición de Experiencia La Salle A y C, un programa que busca compartir con la comunidad estudiantil el trabajo que hacen los Grupos Representativos culturales dentro de la institución. En esta ocasión, los Grupos Representativos de Coro y Banda presentan: Música por el Mundo.
Experiencia La Salle A y C se ha consolidado como el programa de formación de públicos de CREA Centro Cultural La Salle Oaxaca. Cada área disciplinar se encarga de una de las tres Experiencias del semestre: la primera estuvo a cargo de Artes Visuales y Literarias; Artes Escénicas se encargó de la segunda, y la tercera la llevó a cabo Desarrollo Musical. La tercera Experiencia La Salle de Arte y Cultura de este semestre tuvo lugar en Gimnasio Auditorio para las funciones de 1er y 3 er semestre de Bachillerato y 1er semestre de Licenciatura los días 13 y 14 de noviembre de 2024.
Tras unos minutos de acomodo, el conductor del evento da inicio a la Experiencia, describiéndola como un recorrido que conecta continentes y épocas a través de la música. Con esta interesante y afable introducción, el conductor nos dirige a la primera de las dos partes, que conforman la experiencia: la participación del Coro Representativo, bajo la batuta del profesor Gamaliel Ali Villanueva. El maestro Gamaliel da inicio a la presentación, dirigiendo al Grupo coral estudiantil con las obras brasileñas: Mas que nada de Jorge Ben y Maghalena de Sérgio Méndes. Con esta presentación pudimos apreciar la música tan alegre con la que cuenta este país, su samba tan bella que le da una identidad musical.

Una vez concluido el bloque musical que nos transportó a Brasil con los arreglos a cuatro voces, el maestro Gamaliel se da un tiempo para explicarnos cómo se compone el coro de la escuela. En pocas palabras, el coro está dividido en dos: hombres y mujeres, quienes, a su vez, se dividen en bajos y agudos dependiendo de las diferentes tesituras: bajos y tenores para las voces masculinas, contraltos y sopranos para las voces femeninas. Después de su explicación, el Grupo Representativo de Coro ofrece un nuevo bloque musical. Esta vez, la escena se ahogó en oscuridad y solo las notas de música nos ofrecieron consuelo contra la sorpresa que absorbió súbitamente al auditorio con la aparición repentina entre el público de una solista que, acompañada por el coro, entonó el Son de la Bruja. Envuelta en su rebozo y misteriosa, compartió pronto la atención con una personalidad que llegó bañada por la luz de la melancolía: La Llorona, interpretando una pieza emblemática de Oaxaca. Después, un tenor solista interpretó El Jinete, y juntos resonaron en la totalidad de un auditorio hipnotizado por la tradición y el orgullo cultural.

Así, entre aplausos que despidieron efusivos al Coro Representativo, se recibió de la misma forma al Grupo Representativo de Banda de Música, que bajo la dirección del maestro Juan Limeta tocaron bellas piezas como Barras y estrellas de John Phillip Sousa, Vals número 2 de Dmitri Shostakovich y La conquista del paraíso, que por su complejidad maravillaron al público y nos transportaron al mundo de la música. En el momento en que todas las notas nos elevaron a lo sublime del concierto, el Coro se unió a la Banda. ¡Cuánta magia traen las voces! Cantan en conjunto hombres tenores y bajos, mujeres contraltos y sopranos las piezas interpretadas por los instrumentos de la Banda, cerrando el programa con Aleluya del oratorio El Mesías de Handel y O Fortuna de la ópera Carmina Burana compuesta por Carl Orff.

La belleza entonces de la tradición y la cultura, esta vez llevada al ámbito musical, nos genera a todos un vacío al finalizar el evento, pero podemos maravillarnos ahora del gran esfuerzo por parte de los Representativos, de los docentes y del alumnado que hicieron posible tal hazaña.
Nos queda únicamente esperar la siguiente función con la que nos deleitarán los Grupos Representativos culturales de la Universidad.