by epicentro¿Que la creatividad es difícil de lograr?
1a Experiencia La Salle A y C
Rafael Arnáiz y Susana Cueto
Grupo Representativo de Escritura Creativa
Fotografías: Ninandii Antonio, Comunicación Institucional
¿Que la literatura es aburrida? ¿Que la creatividad es difícil de lograr? El Grupo Representativo de Escritura Creativa demostró lo contrario en la primera Experiencia La Salle de Arte y Cultura del semestre agosto-diciembre 2024. Para animar a nuestros estudiantes de 1º y 3º semestre de Bachillerato, y de 1er semestre de Licenciatura a acercarse al número 10 de nuestra revista Epicentro, prepararon actividades lúdicas y creativas en las que se divirtieron al tiempo que descubrieron que todos podemos generar historias y acercarnos a la creación literaria.
El hilo conductor de este número de Epicentro es Luz y Tiempo. La luz es vida y la vida es creación; por lo tanto, la luz es creación. A través del exceso o carencia de luz podemos representar la vida con los contrastes propios de la existencia; sin importar los materiales de trabajo —ya sea con pinturas, letras, lápices, procesos fotoquímicos o electrónicos—, siempre necesitaremos luz para crear.
Experiencia La Salle A y C se ha consolidado como el programa de formación de públicos de CREA Centro Cultural La Salle Oaxaca. Cada área disciplinar se encarga de una de las tres Experiencias del semestre: la primera estuvo a cargo de Artes Visuales y Literarias; Artes Escénicas se encargó de la segunda, y la tercera la llevó a cabo Desarrollo Musical. La primera Experiencia La Salle de Arte y Cultura tuvo lugar en Auditorio de Estelas para las funciones de 1º y 3º semestre de Bachillerato, y en Gimnasio Auditorio para Licenciatura los días 2 y 3 de septiembre de 2024.
May Ulloa y Susana Cueto del Representativo de Escritura Creativa condujeron el programa en el que sus compañeras Karla Aguilar, Isabella Giselle, Guillermo Bohórquez, Grecia Gómez y Eirin Olivera leyeron fragmentos de sus propuestas publicadas en Epicentro 10, compartieron sus procesos creativos y propusieron al público algún juego de creación literaria.
Karla Cisneros, de la licenciatura en Psicología, nos llevó por una irónica metáfora entre las relaciones personales y los componentes de un circuito eléctrico, haciendo énfasis en aprender a soltar y construir relaciones sanas con las personas más allegadas. Después de leer un fragmento, nos compartió su proceso creativo para este cuento: en aquel momento estaba conociendo amistades nuevas y perdiendo otras; un día acompañó a su padre a comprar materiales eléctricos, y la conversación se dirigió al accionar de la electricidad en los circuitos. En su interior, Karla conectó lo personal con este funcionamiento y de ahí surgió su texto Conexiones eléctricas.
Invitó después al público a que escribiera pequeños textos que terminaran con la frase y nos electrocutamos. Algunos de los resultados fueron textos muy creativos y divertidos, como:
Ella y yo salimos bajo la lluvia, nos abrazamos y nos electrocutamos.
Nuestros corazones tienen chispas y juntos nos electrocutamos.
Tú positiva, yo negativo; un beso furtivo y nos electrocutamos.
Fue el turno de Isabella Giselle, estudiante de Arquitectura, que compartió un fragmento de Ahogamos a nuestros ingenuos, una historia onírica e inquietante que transmite una extraña melancolía. Después de la lectura compartió el génesis de su cuento, que inició en la que era su materia favorita del bachillerato; el detonador del argumento fue la historia de vida de un miembro de su familia. Y tiempo después retomó ese texto para llegar al cuento que se publicó en Epicentro 10. Como actividad lúdica, ella decidió hacer estrellas en origami con frases en su interior, para regalarlas a quien respondiera preguntas sobre los textos leídos.
La tercera participación fue de Guillermo Bohórquez que con mucha naturalidad logró las risas del público al hablar de su proceso creativo, aludiendo a que todos podemos escribir aun cuando sea una historia cliché de amor como AFTER.
Con su tono informal, invitó a una fila del público a crear una historia colectiva: Memo dijo una frase detonadora, como En la cabaña del bosque vive una bruja que… La primera persona de la fila agregó una frase, la segunda una palabra y así sucesivamente hasta el último de la fila, dando como resultado que las personas asistentes dejaran volar su imaginación sobre personajes malviajándose con la luz, o cables que nunca se corroerán.
Al terminar esta actividad, Guillermo nos llenó de nostalgia con su texto Rogar por memoria. Se sintió como un momento cúspide de la Experiencia cuando el público reaccionó a la frase ¿Quién hará salsa verde para mí? No habrá nadie que me llame con voz temblorosa para sentarme a comer. Sin duda fue un momento de silencio y sorpresa para todos. En seguida Guillermo continuó con otro fragmento carismático sobre el mismo tema: recuerdos y nostalgia al final de la vida: Vino a despedirse.
Susana y May presentaron a Grecia Gómez, que explicó cómo relaciona su carrera, la arquitectura, con la luz y el tiempo, para después leer un fragmento muy poético de su texto. Ella arrastró a los asistentes a una papa caliente literaria con una pelota gigante de playa. Cuando la pelota se detenía por indicación de Grecia, quien la tenía en sus manos leyó un fragmento del texto de Grecia para darle voz a las palabras escritas por ella. Las reacciones hacia el objeto fueron de lo más cómicas sin importar la edad, desde adolescentes de bachillerato hasta los universitarios, pasando por docentes y administrativos que observaban divertidos el proceso.
Como última participación, Eirin Olivera compartió un fragmento sobre el famoso mito de Zeus y Cronos, aquel titán que personifica al tiempo en la antigüedad clásica. Cómo la palabra escrita venció al tiempo y cómo este es un monstruo que constantemente nos asecha. La especie humana vive con ese fantasma desde tiempos inmemoriales, y tal vez nuestros ahora metarelatos sean preocupaciones para las próximas generaciones.
Al final de la Experiencia, los integrantes del Representativo contestaron preguntas respecto a la escritura y cómo se relaciona con sus vidas personales, dando tiempo para el público las conociera más allá de los textos presentados. Ellas y él trataron de saciar la curiosidad de los estudiantes sobre los motivos por los qué escriben, o cuál es su libro favorito, dejando como experiencia final que muchos asistentes descubrieron ese gusto y talento.
